"Ibon" es el nombre que reciben los lagos glaciares que reposan en el corazón del Pirineo aragonés, y es también la inspiración de este colgante. La pureza del cuarzo craquelado, su delicada fragilidad y su luz etérea capturan la esencia de esos hielos cristalinos, transportando toda la serenidad y belleza de estos paisajes únicos.

La cadena mide 42 cm de largo y está chapada con 2 micras de espesor de oro de 24kt. La base es de latón libre de níquel y de plomo.

• Hipoalergénico. Libre de níquel y de plomo.
• Cada paso del proceso —diseño, producción, chapado y montaje— se realiza de manera local y artesanal, entre nuestro taller en Zaragoza y pequeños talleres familiares en España.